En el corazon de la Costa Azul: Antibes

A Antibes llegamos sin saber na de na de este sitio, simplemente nos subimos en un tren en Niza con destino a Cannes, Marsella,... y decidimos bajarnos en esta población.

Para nuestra sorpresa se trataba de uno de los lugares más caros de la famosa Riviera francesa, lleno de casas y playas chulísimas, pero plagado de ricos aburridos. Total que ni chicha ni limona, así que ahí decidimos que estariamos pokito, pokito tiempo.

Para colmo el alojamiento un lío. En la oficina de turismo nos mandaron a una residencia que se pasaba de estrellas como alojamiento económico, menos mal que allí un chaval se enrrolló y nos localizó una preciosa villa junto al mar llamada "Relax Internacional de la Juventud" para viajeros con mochila y otros especímenes. El problema era que estaba lejísimos y no había casi servicio de bus. Os podeis figurar la paliza andar que nos dimos por la tarde para ir y volver hasta allí tras darnos un paseito.

Yo creo que no he andao más en mi vida que ese día, los sangüiches de la noche me sabieron a langosta y caviar.